En 799 días que Luis Arce ocupa la silla presidencial, son 244 los presos políticos, 20 muertos y cientos exiliados.

28 de diciembre 2:25 de la tarde empezaban las llamadas desesperadas, Camacho había sido secuestrado, de manera violenta, a pesar de la predisposición del gobernador a colaborar para no traumatizar más la situación.
En medio de gritos y llanto me piden que salga en vivo a través de Facebook para viralizar el secuestro del gobernador. No me atreví a preguntar si estaba segura de lo que decía Gabriela, funcionaria de la gobernación, que esta vez me llamaba como amiga de Luis Fernando Camacho.
De inmediato empecé a grabar, aquí eran las 10:30 A.M. A medida que hablaba de lo ocurrido, de lo que se me pidió informar, en vivo me preguntaban si estaba segura, porque era el día de los inocentes, una y otra vez me decían que tal vez era broma de mal gusto.
En medio de la grabación, yo misma empecé a dudar, pero no podía decirlo en vivo, al terminar empezaron a llamar más personas, y me reconfirmaban que era cierto, que el periódico El Deber acababa de dar la noticia.
Desde ese día a hoy han encarcelado a 50 personas, todos presos políticos, 5 de ellos de Cochabamba, 45 de Santa Cruz. Solo una persona recuperaba “parte” de su libertad de los 193 presos políticos en ese momento, de estar encerrado en su casa con detención domiciliar sin derecho a salida, el presidente del Comité Pro Santa Cruz al día siguiente del secuestro del gobernador ya podía salir a las calles, bajo libertad condicionada.
11 personas fueron detenidas al día siguiente del secuestro del gobernador, 15 personas el 30 de diciembre, 2 personas el 31, en plena despedida de un año lleno de abusos y atropellos a los derechos fundamentales por parte del régimen de Luis Arce Catacora y su ministro Eduardo del Castillo. Ese mismo 31 el presidente de la asamblea departamental Zvonko Matkovic, tuvo un amague también de detención, impedido por la gente que lo acompañaba.
El 1ro de enero de 2023 fueron 11 los detenidos, y 11 desde el 3 de enero hasta hoy.
Volviendo atrás, para llegar a lo más triste que ha pasado desde el secuestro, el 1 de enero Edwin Chávez, un ciudadano que no participaba de las protestas recibe un disparo de la policía en el rostro, el 13 de enero Edwin fallece. Las imágenes de su madre a gritos por la calle reclamando por la vida de su hijo, y las imágenes del hijo de Edwin en el entierro el día 16 ha quedado en uno de los recuerdos más triste de los cruceños, marcando una vez más en la historia de ese pueblo tragedia causada por quienes desprecian la libertad.
La misma persona que me alerto sobre el secuestro de Luis Fernando, también me alerto cuando intentaron detener a Zvonko, él, la asambleísta Keila García, el vicegobernador Mario Aguilera y otros habían sufrido gasificación directo al rostro en medio de una marcha pacífica, al mismo tiempo la asambleísta Paola Aguirre tuvo que ser también llevada a emergencia, pero con una herida en la cabeza que le provocaron los policías.
Esto último pasaba el 31 de diciembre en Santa Cruz, mientras en Chonchocoro, la cárcel de máxima seguridad de La Paz, el gobernador empezó a sangrar por la nariz, estaba descompensado, sin el tratamiento médico que debe llevar de por vida.
Ante esta nueva llamada para que avise a la población a través de las redes, en mi desesperación, sin importarme que sea sábado, y un 31 de diciembre, como organización (Global Human Rights League, GHRL), empecé a mandar mensajes de auxilio a la OEA, la Organización de los Estados Americanos, 3:18 P.M. Hora del Este, la OEA recibía mi primer mensaje, 59 minutos después ya empezaban a responder, fue un alivio, y más cuando pidieron que mande todo lo que se pueda con las respectivas fuentes. Habíamos sido escuchados.
El departamento de comunicación de la gobernación inmediatamente empezó a mandar las notas de prensa que fueron requeridas por la OEA, hasta las 7:30 P.M. Ya tenían en sus manos 37 pruebas contundentes de las violaciones a los derechos humanos que cometió el gobierno desde la detención del gobernador Luis Fernando Camacho.
Ellos no han sido los únicos agredidos, en medio de las protestas reprimidas por órdenes de la policía que responde al régimen autoritario, se contaban en decenas las personas que llegaban a ser atendidas en hospitales, los enfermeros y doctores mostraron públicamente los plomos que extraían de los cuerpos de los heridos, para que quede como constancia de la brutalidad.
Periodistas también fueron brutalmente atacados por policías, el mismo 31 en una arremetida criminal del gobierno contra la población, en medio del humo, disparos y gases, un policía se jactaba celebrando a gritos el poder otorgado por Luis Arce y Del Castillo para arremeter en contra de los cruceños.
Para terminar, es muy triste tener que decir, que la falta de humanismo de Luis Arce, la carta en blanco que le ha dado al ministro de gobierno abiertamente comunista, para que haga lo que le dé la gana con la oposición seguirá siendo causa de detenciones, heridos o muertos, porque Santa Cruz no se cansará de luchar por su libertad, la libertad de Luis Fernando Camacho, la libertad de todos los presos políticos y en definitiva la libertad de todos los bolivianos.
Hoy son 244 los presos políticos del régimen de Luis Arce, 20 los muertos y ya se cuenta en centenas los que huyen para salvaguardar su libertad, su dignidad y sus vidas desde el 2020.

Consultora y Activista de los Derechos Humanos y prevención de trafico humano. Estudió International Women’s Health and Human Rights en Stanford Universityty. Estudió Child Protection: Children’s Rights in Theory and Practice en Harvard University. Presidente de Global Human Rights League. Presidente Editora de “El Oriental”. Conductora de Bolivia en las Redes. Nutriologa y Publicista. Exiliada política boliviana.